Para iniciar, falta un poco de contexto de Bernal Díaz del Castillo. Fue soldado español que viajó al Nuevo Mundo bajo las expediciones de Pedro Arias de Ávila. Participo en varias batallas y expediciones, las imprescindibles siendo los viajes a México: el descubrimiento con Francisco Hernández de Córdoba en 1517, la exploración con Juan de Grijalva en 1518 y la conquista con Hernán Cortés en 1519. Al momento que escribe el texto, es regidor de la ciudad de Santiago de Guatemala.
Capitulo XVIII: En éste capítulo, Castillo se dedica a la negación de todo lo que el “mal informado” (42) Gómara ha escrito sobre la conquista. Por ejemplo, aparece frases como “Gómara… no quiso ver ni entender… que los verdaderos conquistadores y curiosos lectores que saben lo que pasó, claramente le dirán que en su historia en todo lo que escribe se engañó” y que “las demás historias que escribe… también irá todo errado” (43). Aquí, Castillo claramente deja saber que Cortés no fue el único conquistador y que Gómara escribió una mentira. Además Castillo aprueba su propia voz como verídica cuando habla de unos errores que cuenta Gómara (mediados de p. 43) e interpone su argumento diciendo “mas la verdad es así” (43). Existen varios ejemplos de este estilo, en que conté aproximadamente 26 veces que Castillo invalida a Gómara por diciendo que hizo error o es mal informado etc. Por cierto Castillo confirma que él es honesto y muy bien informado. Acerca de este último punto Castillo declara que Gómara habla de “contrariedades y falsas relaciones”(45) por ser parte de un grupo que “escribieron de oídas” que significa que lo que ellos escriben son cuentos de alguien mas. Pero al contrario, Castillo y sus compañeros hablan la verdad “como testigos de vista” (45) o es decir porque ellos pasaron por estos relatos personalmente.
Capítulos LXXXVIII-XCIII: Lo impresionante de estos capítulos fue el muy gran detalle en que Castillo recuerda los relatos de la entrada a Tenochtitlan. Se dice que Castillo ya estaba muy viejo cuando escribió éste texto y que lo escribió de memoria. Éste acto es sensacional en si mismo. Aparte de esto, aparece la incluida de la doña Marina como traductora y personaje de importancia para Cortés y los españoles (p. 210-11) hasta citándola traduciendo las palabras de Montezuma en la p. 211 <
Sobre todo creo que el relato de Bernal Díaz del Castillo ofrece un artículo de relleno a cerca de la información sobre la conquista del Nuevo Mundo, que tanto nos hace falta tomando en cuenta la ofrenda magra de las cartas de Cortés y los trabajos miopes de Gómara y otros historiadores.
Buen hecho Rafa. Me gusta mucho lo que has escrito. Me es obvio que desde el principio esta historia no es solamente una historia sino un ataque a las historias de Gómera, Illescas y Iobio. Y no debemos olvidar que no es sin propósito alguno que Bernal escribe la historia. Lo escribe porque quiere mostrar al Rey que eran los soldados que conquistaron la nueva España, no solamente Cortés. Como has notado, en el prologo dice “…autor de esta muy verdadera y clara historia.” y eso implica que hay otras historias que son menos verdaderas y menos clara. De manera directa ataque la historia de Gómara y dice “que también hizo errar a dos famosos historiadores…” Cierto es.
ReplyDeleteBueno mi comentario después de haber leído no solamente tu analysis sino también el Prologo y Cap. XVIII* es que la manera en que escribe es un placer leer – incluye tantas detalles que uno puede imaginarse en el lugar. Estoy muy de acuerdo con que habla así como habla de la Malinche. Es obvio que no pudieran haber conquistado la Nueva España sin la ayuda de ella. Me pregunto que la motivaba.
Me impresionó que empezaron a enseñar a Montezuma acerca del evangelio de Jesucristo, y que dice que Él hizo “el cielo y tierra, y la mar y arenas, e crió todas las cosas que hay en el mundo…” (214) Eso es una muestra mas de lo que ya he dicho. Los conquistadores realmente creían que lo que hacían era justo.
De hecho, encuentro este libro tan interesante que una vez tengo tiempo libre intento leerlo todo.
¡Muy bien Rafa! Me gusta epecialmente como señalas el título de esta obra, que ya está cargado con implicaciones de la cosmovisión de Díaz y de España. Con un deseo de aclarar el asunto ante un lector occidental, Díaz escribe su cuento y su versión de los eventos conquistales en un estilo de plática informal. Se dedica su libro refutar las obras de Cortés y Gómara. Díaz siente una urgencia de enseñar a los europeos de lo que pasó “verdaderamente.” Sin embargo, hay que preguntar, ¿es un cuento inocente, sin compromiso? En el prólogo Díaz nos da un contraste chocante: el “valeroso y esforzado” Cortés “fue Marqués de Valle” por “sus heroicos hechos” (51). Al contraste, dice que no tiene “otra riqueza que dejar a mis hijos y descendientes, salvo mi verdadera y notable relación” (51). Aunque la gran conquista fue cumplido no solo por Cortés, sino con la ayuda de los soldados valientes, Cortés queda con toda la gloria y riqueza.
ReplyDeleteEl título también señala la mentalidad europea de apropriarse de tierra extranjera, llamándola “Nueva España.” Declara que esta tierra ya no pertenece a los “indios” sino es la promesa de una vida nueva y de prospectos sin límite para los españoles.
Como observa Rafa, el tema de la Malinche es sumamente interesante. Su cuento está tan lleno de intriga, amor y traición que todavía la hace una figura controvertida actual. Como fue amante de Cortés, dió luz a su hijo y fue central en la conquista, es sorprendente que Cortés ni la mencione en su carta. Según Díaz ella fue la que informó a los españoles del ataque planeado por los indígenas de Cholula (65). En su segunda carta Cortés menciona el ataque que fue evitado por una mujer pero no dice nada de la Malinche (53).
Has elaborado un análisis muy conciso, Rafa. Como bien lo mencionas, manifestar lo verídico de la conquista es el asunto de importancia que presenta Bernal Díaz. Pese a que Díaz fue soldado durante la conquista, éste presenta su propia versión; una versión que es, quizás, mucho más validad que la de Cortés porque él como soldado se ha dado cuenta que Cortés quiere tomar todo el crédito por lo que todos han aportado a España. Esto se liga al punto que más me llamó la atención: “Y es lo bueno que ensalza a unos capitanes y abaja a otros” (p. 43). Aquí, Díaz rechaza la idea de Gómara porque como bien lo dice, Gómara no acierta, sino que le está dando créditos a otros y abajando a los que sí hicieron tal evento; Gómara dice que un tal Juan Velázquez de León fue a poblar a Guazacualco cuando en realidad, según Díaz, fue un tal Gonzalo de Sandoval.
ReplyDeleteAsimismo, al leer las palabras de Bernal Díaz, como cuando dice que no es cierto que ellos mataron miles de indios (siendo ellos menos que los indios) y que en realidad ellos rezaban para que no los mataron, me hace pensar de las muchas mentiras que se Cortés le escribía al rey; el hecho que Cortés se presenta como héroe cuando en realidad estaban rezando para que no los mataron los indios; porque como bien lo dice Díaz, esa ventura fue peligrosa porque los indios no estaban atados.
En fin, creo que la carencia de documentos y testigos de la conquista nos dejan con muchas preguntas sobre lo que en realidad pasó en ese momento histórico.
Gran análisis el de Rafa. Creo que hace muy bien en detenerse en el propio título de la obra y plantear que con sólo la palabra "verdadera", Bernal Díaz del Castillo anuncia una clara intención: limpiar de errores y erratas la historia de esa conquista que otros agentes no-presenciales han contribuido a distorsionar. La crítica nada disimulada y reiterativa de Bernal contra Gómara —la cual me causó gracia por parecer la de un viejo cascarrabias— es muestra suficiente de este propósito, pero no debemos olvidar que su versión también contradice otras crónicas de agentes sí presenciales, como la del mismo Cortés. Quizá no le fuera políticamente correcto hablar en el prólogo contra Cortés y sus omisiones y su discurso auto-glorificador, pero ahora sabemos que no era realmente necesario, pues la totalidad de los protagonistas (con sus respectivos nombres) que él evoca y la descripción tan detallada del trasfondo social, terminan por convertir la obra de su capitán en un documento mono-dimensional e intencionalmente limitado. Parece quedar claro para Bernal que la historia debe incluir todas las voces que la protagonizan, aunque él mismo, por ser europeo, no pueda ser una parte imparcial en la narración de la misma. Me pareció un momento bien crucial el del capítulo XCII, donde Moctezuma le hala las orejas a Cortés después de éste deshonrar atrevidamente a sus dioses, y Cortés se haya obligado a responderle: "pues que ansí es, perdone, señor". Este incidente incluido por Bernal nos delata la simple naturaleza humana de Cortés, en la que su instinto de conservación sobrepasa su determinación religiosa. Parece decirnos que si Cortés tuviera que renunciar a su dios (aunque sólo fuera de palabra) únicamente por sobrevivir, también viviría subyugado el resto de su vida al igual que los mexicas. No parece ser Cortés entonces, ni los otros españoles, super hombres después de todo en la Historia Verdadera. A fin de cuentas, el dios europeo es uno también estratégico y militar como Vichilobos, que igual da cabida al miedo, a la ambición, a la matanza, y a la derrota.
ReplyDeleteCon esta declaración, Díaz del Castillo había empezado una guerra de palabras. Cuando acusa a Cortes y a su vez a Gómara por haber manipulado algunos detalles de sus relatos y destaca el número verdadero de soldados fallecidos a la mano de las mexica, es como si el intentara reclamar el poder del testigo que sí sabe. Al revelar la supuesta cantidad de muertos en la batalla de Taxcala, “ nos mataron e sacrificaron sobre ochocientos y sesenta soldados;” y al decirlo dos veces para que quede claro, “digo otra vez sobre ochocientos y sesenta soldados” (44), él cuestiona la validez de los relatos de Cortes pero a la vez, se forja una reputación de ser la voz de autoridad. Habíamos comentado un poco en clase este fenómeno del “yo que sabe” que existe en no solo estos relatos de la conquista sino en toda la historia.
ReplyDeleteEsta manipulación de la palabra me hizo preguntar cómo esta versión nueva y supuestamente verdadera de la historia fue percibida por el público en aquellos momentos. Un ciudadano cualquier en España, no tendría la menor capacidad de juzgar las distintas interpretaciones de lo que estaba pasando en el Nuevo Mundo. Se recontaban paisajes, civilizaciones y gente tan fuera de la esfera de entendimiento cotidiano español, que los conquistadores pudieran haber escrito casi cualquiera cosa sin preocuparse por su validez. Por eso me parece que para ellos que fabricaban la historia del nuevo mundo, era menos importante lo que recontaban si no, con que autoproclamada autoridad lo presentaban.
Los dos puntos que más me influyeron fueron las detalles elaboradas y la inclusión de la doña Marina. Estoy de acuerdo con Veronica, fue un placer leer este. Me dio un buen sentido de cómo era esta civilización antes de los españoles. He visitado Tenochtitlan y esta lectura trajo vida a lo que vi cuando visité las ruinas. No me puedo imaginar lo que los españoles deben haber sentido cuando visitaron el templo con los corazones y la sangre de los sacrificados. No es sorprendente que puesto las creencias católicas de los españoles, pensaron que la religión indígena fue algo del diablo. Esta lectura también nos provee una idea del extento de la importancia de la Malinche.
ReplyDeleteLos dos puntos que más me influyeron fueron las detalles elaboradas y la inclusión de la doña Marina. Estoy de acuerdo con Veronica, fue un placer leer este. Me dio un buen sentido de cómo era esta civilización antes de los españoles. He visitado Tenochtitlan y esta lectura trajo vida a lo que vi cuando visité las ruinas. No me puedo imaginar lo que los españoles deben haber sentido cuando visitaron el templo con los corazones y la sangre de los sacrificados. No es sorprendente que puesto las creencias católicas de los españoles, pensaron que la religión indígena fue algo del diablo. Esta lectura también nos provee una idea del extento de la importancia de la Malinche.
ReplyDeleteEl post previo de anonymous es mio, de Tracy Kosmecki
ReplyDeleteInteresante análisis Rafa, ¡felicitaciones!
ReplyDeleteSi López de Gómara es culpable de magnificar los hechos de la conquista de México, tanto mayor lo es Cortés. La magnificencia de los hechos ocurridos en México durante el paso cortesiano y que en la pluma de Gómara se acrecentaron cuantitativamente en miles y miles de adornos, tuvo un muy interesante nacimiento otomano.
Gozaba Gómara de reputación religiosa y orgullo cronístico cuando su pluma se cruzó con Cortes allá por el año de 1542. La batalla de Argel, contra el ejercito otomano, había llevado a España a dichos predios, habiendo sido este el punto de encuentro para que naciese una amistad entre el primero que vestía sotana y el segundo que llevaba grados de capitán general. Terminada la guerra, Gómara serviría a Hernán como capellán hasta que la muerte hizo morada en Cortés en Castilleja de la Cuesta, Sevilla, un dos de diciembre de 1547, llevándose consigo al conquistador de México.
¿Por qué magnificó Gómara los hechos del conquistador y por ende la figura del mismo?
Cinco años de trabajo (1542-1547) fue el tiempo necesario para amasar una historia que de la pluma de Gómara dejó en Cortes una deliciosa gloria personal. Este detalle de amistad pudo haber tenido en ambos un efecto tremendista al proyectar Gómara sus impresiones sobre la empresa cortesiana en el lado Oeste del Caribe.
Quiero partir de una lógica, para mí, bastante obvia y es el hecho de que Cortes estaba henchido de orgullo con eso de su descubrimiento y conquista y necesitaba que su nombre se enraizara en las cuatro esquinas de la península con una fuerza tal que le imprimiera a su imagen el deseado lugar de admiración y reconocimiento eterno. Teniendo Cortes de su lado a un cronista de la talla y mesura como la de Gómara la mesa estaba servida para repartir augurios interpretativos a diestra y sinistra a favor de su persona. La mayúscula interpretación de los hechos por parte del sacerdote fue el resultado de un empuje dorado con grandes vetas de afecto que emocionó al clérigo acrecentando su imaginación.
Bernal D. del Castillo toma posición histórica para destacar que Gómara cometió más de un resbalón en la redacción de los hechos acaecidos en México. En su obra la “Verdadera historia de la conquista de Nueva España”, del Castillo, se siente obligado a restablecer con exactitud histórica lo acontecido, haciendo notar los errores de Gómara cuando éste último magnificando el pasado de una historia que solo llegó a sus oídos por boca única del conquistador Cortes, quiso sacar tajada fácil al mejor estilo parnasiano narrando los hechos de la conquista de México desde un lado triunfalista y personalista, convirtiendo el pasaje más que en una historia verídica en una biografía de carácter plutarquiano destinada a agigantar la personalidad de Cortés.
Muy bien acertado todo, Rafa. Has hecho buen argumento, y me gusta que menciones tanto la cuestión de autenticidad. Me parece que todos conquistadores y escritores se ocupaban de 'el relato verdadero', incluso atacarse uno al otro, por razones del egoísmo sobre todo. Castillo era participante en todo, así cabe bien decir que sus memorias tienen una cierta autenticidad. Sin embargo, siempre toca al lector decidir cuáles son los hechos verdaderos, y cuáles son los de mito, porque, como indicas, el elemento de ataque tiene gran influencia en la construcción de la imaginada 'verdad' de la situación. Hay que pensar en la omisión de ciertas hazañas a favor de otras, la exageración, etc, para entender el propósito y efecto de tal obra.
ReplyDeleteEn su prologo, Díaz mencionó que su historia "es muy verdadero, que como testigo de vista me hallé en todas las batallas y reencuentros de guerra; y no son cuentos viejos, ni Historias de Romanos de más de setecientos años..." Veo este declaración en dos sentidos. No se si uno o el otro o las dos son lo correcto, pero así son: el primero es que Díaz está comparando las hazañas de Cortés con los de la historia y los Romanos. Es decir que lo que hizo Cortés fue tan grande y notable que uno podría confundir el cuento de lo que hizo con los grandes relatos de la historia romana. El otro posibilidad es que Díaz estuve haciendo una burla de Gómara y los otros escritores que estuvieron contando la historia de Cortéz en una manera mítico y no real y "verdadero".
ReplyDelete-Jonathan Salfen
Este fue un artículo agradable. Definitivamente es interesante tener la perspectiva de un soldado que participó activamente en la guerra. Sus puntos de vista glorificar el trabajo de los soldados más que las de los capitanes. Sus historias son plausibles. Pero yo no soy aceptar rápido su palabra sobre los previamente por escrito, simplemente porque él llamaba su historia la “verdadera." Tenía la motivación que mentir. El hecho de que él lo escribió años más tarde, también significa que podría haber diferencias en lo que realmente ocurrió. No estoy diciendo que Díaz es menos veraz que Cortés o Gomara. Estoy argumentando que existe la posibilidad que no es más veraz. Todos ellos tienen algo que ganar y no sería la primera vez en la historia que hemos visto una historia contada en contradicción sólo por la fama.
ReplyDeleteLa información más interesante para mí es la información acerca de la Malinche. Las mujeres no suelen ser retratados como héroes o importantes, incluso a través de la historia. Hablamos de los conquistadores, no los conquistadoras. Todavía sigue siendo un tema discutible y misteriosa aún hoy en día.
Me acuerdo que cuando yo leía el título, 'La historia verdadera' me preguntaba, "Entonces, las cartas que hemos leído hasta ahora no son verdaderas?" No podrían haber los demas darles a sus propios cuentos el mismo título, y entonces como sabríamos cual era la verdad? No estoy diciendo que Castillo está inventando su historia, solamente no soy la que cree la primera persona que dice que su explicación es "la verdadera." Esta historia de Castillo me hace pensar en cómo Colón y Cortés elaboraron en sus cartas al rey para ganar favor, honor, poder y dinero. Me imagino que había muchos soldados que luchaban bajo el liderazgo de Cortés y que día tras día reciban órdenes riesgosos y que no tenía otra opción aparte de obedecerle aun cuando creían que las razones eran equivocadas. Y después de riesgar sus vidas y por fin conquistar al nuevo mundo, tenían que mirar desde afuera mientras Cortes recibía toda la gloria y crédito. Imagínense ustedes de los celos que fluían por los pechos de los soldados olvidados.
ReplyDeleteOtra vez, no estoy diciendo que la historia de Castillo era mentira, sólo quiero presentar la posibilidad de que como todos los otros líderes en la conquista del nuevo mundo parece que siempre tenía motivos ulteriores. Mientras Cortés le escribía al rey para mostrar cuan poderoso y maravilloso era, puede ser que muchos años después, Castillo todavía se sentía rencor hacia el líder y su única manera de ganar venganza o de también ganar favor con el rey fue de contradecir las historias anteriores por reclamar su falsedad para menospreciar su palabra con el aumentar de su propia.
Lo que interesó de Bernal Díaz del Castilla es su propuesta de su propia veracidad. El negó todo lo que no estaba de acuerdo con su testimonio como mentira, historia falsa de fuente falsa. Mencionó que fueron testigos y sabían lo que pasó. Este ataque y pues lo todo que actualmente pasó en esta época me fascina mucho. Como Oswald escribió <<… la historia fidedigna, es mejor que cualquier imitación semejante…>> . Como ya han mencionado otros la informalidad de la escritura de Bernal me gusta su juego de palabras en decir <> Es muy obvio el nivel de la inteligencia de los dichos conquistadores, personas que se pensaría en ser brutos. Aparece que la historia de lo que sucedió en la conquista del Nuevo Mundo no solamente es algo discutible sino que ya la fue tanta inmediatamente después. Además añaden los otros puntos de vista al hecho de que empezaba el siguiente paso de en la historia mundial porque comparan los individuos a los de los siglos de antigüedad pero había un sentimiento de lo que más notable, más largo que anteriormente. Es algo que se requiere en pensar hasta hoy en día porque como en el caso de los Romanos nosotros todos fuimos impactado por la conquista.
ReplyDeleteMuy buen trabajo Rafael. La verdad es que me gustó mucho leer estos escritos de Bernal Díaz del Castillo. Tanto el prólogo como los diferentes capítulos tienen un tono muy auténtico y personal. A diferencia de las cartas de Colón y Cortés no me pareció que Díaz del Castillo estaba tratando de impresionar a nadie, sino más bien creo que trató de dejar claro que la conquista de México no se le debía atribuir solamente a Cortés, pero también a los soldados que lo acompañaban. Algo que me llamó mucho la atención y que tú resaltas en tu análisis fue el hecho que Díaz del Castillo escribe que Moctezuma decía “Señor Malinche” para referirse a Cortés, esto me pareció súper interesantísimo, ya que en la carta de Cortés éste se limita a mencionar a la Malinche como una india que le traducía, pero en estos escritos de Díaz del Castillo podemos ver el rol significativo que jugó la Malinche en la conquista de México. Maritza González
ReplyDeleteMe gusta mucho la comparación entre los diarios de Cortés y Díaz, porque, en mi opinion hay cosas diferentes entre el estilo de los dos autores, y también en las recuerdas de los eventos. En las descripciónes de sus viajes, los parrafos son usualmente mas precisas. No hay muchas palabras elaboradas que pintan un imagen maravillosa en el mente del lector, como Cortés. Por supuesto sus descripciónes reflejan las vistas con asombro, especialmente para las experiencias nuevas. También, la cantidad del oro en la ciudad de México fue probablemente abrumadora. Pero, Díaz escribe como un soldado común, sin una educación de la ley. Hay menos comparaciones de los Aztecas y los Moros, y menos palabras causar un tono a influir el lector.
ReplyDeleteTambién esta claro que la introducción entre Montezuma y Cortés era diferente entre los recuerdos de Cortés y Díaz. Díaz dice, “...que iba junto a Cortés , le daba la mano derecha, y el Montezuma no la quiso e se la dio al Cortés.” y esta claramente diferente a la descripción de el saludo de un Dios, como describe Cortés.
Pienso que, la opinion más importante sería la de la Malinche, pero nadie saben las ideas y memorias de ella.
Buen trabajo Rafa. Como señalaste en tu análisis también me llamaron la atención las varias veces dónde él invalida a Gómara; él lo hace tantas veces que entre casi toda la obra siempre tiene un tono muy parecido a un desacuerdo académico contemporáneo. Cómo mi colega Joe escribió, creo que esta constante intención de refutar las otras obras sobre el Nuevo Mundo por Díaz tiene un doble afecto muy importante: su escritura es bastante importante porque desafía a las otras obras ya muy leídas en España en esa época y que a veces siguen siendo utilizados como textos primarios verídicos hoy en día; su obra quiere cambiar la noción de que solo había una perspectiva valida de la conquista y creo que esto es positivo. Al mismo tiempo, su insistencia en que lo que escribe es verídica ya es muy problemática porque realmente no había una persona grabando toda la conquista que está disponible en youtube para todo el mundo a ver, y como buenos lectores críticos que somos no podemos confiar en solamente una voz, tenemos que considerar a todas, especialmente las de la gente “conquistada” que mayormente no fueron escritas. Desafortunadamente para comprender esta época de historia es necesario imaginar un poco y analizar las intenciones y funciones de las obras que tenemos a nuestra disposición.
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